Así se llama la visita organizada por Engranajes Culturales a los restos arqueológicos romanos situados en Villanueva del Río y Minas.

Sin ruidos, en mitad del campo, inicio de la sierra de Sevilla, se muestra imperioso el santuario que, durante años se pensó fortaleza o castillo, debido a los contrafuertes que se observan en la fotografía.


A sus pies, aprovechando la colina y rompiendo con todos los esquemas conocidos de urbes romanas, el resto de la población.

Tras una ruta en coche por una carretera un pelín incómoda, llegas a Munigua, una antigua población romana dedicada a la minería, cuyo restos muestran familias de gran poder adquisitivo, puesto que podemos encontrar un gran templo dedicado a varios dioses, unas termas públicas y varias casas amplias, de gente acomodada y que serían de varios pisos. Además de un foro, pequeño, pero que determina si una ciudad es importante o no, en lo que a la cuestión económica se refiere. También una Basílica puede encontrarse en las inmediaciones de este foro.

Es cierto que muchos de los restos se encuentran en el museo arqueológico de Sevilla y que algunos edificios se restauraron "de aquella manera" en los años 50, cuando no se tenían los medios ni los procedimientos para no dañar el material que ahora mismo se tienen. Pero aún así, al igual que cuando paseas por el conjunto arqueológico de Itálica, puedes imaginar, revivir y reconstruir lo que fue el municipio hace dos mil años.


Quizás no valoremos lo suficiente la riqueza histórica que tiene nuestra tierra. Puesto que esta ciudad fue residencia de gente acaudalada del propio Lazio romano y es conocida por historiadores de la época clásica, ya que fue una potencia en la mina del hierro y el bronce durante varios siglos, y suministró estos metales al Imperio Romano de manera contundente.

Gracias a Engranajes Culturales, en especial María y Carolina, las chicas que nos acompañaron por esta "ruta de senderismo", podemos conocer una ciudad romana singular, que en su tiempo fue poderosa y que, desgraciadamente, es desconocida para casi todos los sevillanos. Merece la pena apuntarse y conocerla.

Altar dedicado a Mercurio

Vista desde el Santuario, se observan varias casas

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