Escuché "19 heridos en vía Lavietana" y me imaginé a unos diecinueve senadores romanos, tirados en el suelo, con las togas manchadas de sangre, que se disponían a ir al Foro pero fueron sorprendidos por una horda de bárbaros galos.

Pues no. Hay más vías lavietanas. Y era Laietana. Y en Barcelona. Donde la alarma sona. Como la bolsa. Pero como la bolsa ya no sona tanto, pues la mueven y la agitan para que parezca que sona.

Yo no entiendo el conflicto catalán. Sí, ya es conflicto. Como siempre ha sido. Como el vasco. Siempre lo fue, pero con dinero se callaron. Y le cambiaron el nombre. Pero por ese desconocimiento -no leo noticias ni veo telediarios, mi vida periodística se reduce al tuitlist de determinados amigos y gente cercana-, o por incultura política, no me atrevo a posicionarme en un lado ni en otro. Ni a favor, ni en contra de la independencia. Creo que me da igual. Vamos, sí, me da igual.

Quizás por ser andaluz y tener ese caracter tan alejado del norte -y empiezo a entender la animadversión que nos tienen otros pueblos-, no me veo haciendo barricadas. Aquí fue hace años en el puente Carranza y, básicamente, era para ganar el pan propio. No eran cuatro niñatos mal pelados, eran padres de familia. En Canal Sur, mientras el resto de cadenas echaban partidos de béisbol en los que los Mossos de "escuadra" sacaban a sus mejores bateadores, estaban echando un programa de talentos, cosa que odio. Pero ayer me alegré. Tierra de talentos, así se llama el programa. No quiero que esto se convierta en la defensa del sistema socialista propuesto por tantos años en Andalucía, ni voy a poner la mano en el fuego por ningún directivo de Canal Sur. Pero me siento tan orgulloso de vivir tan tranquilo "aquí abajo"... Saber que mientras las tartesas morenas lucían joyas de oro, los poblados íberos seguían con lanzas y vestían con taparrabos, me da paz de espíritu, como decía aquel. En fin.

Tengo varias dudas y necesito que me las resolváis. Haced algo, coño, no solo leer (Dios, cómo me ha dolido no ponerle tilde a ese solo...):

Mi intención tampoco era hacer aquí una disertación o discurso. Es que apenas tengo opinión sobre el tema. Pero me surgieron esas dudas. No son ni mucho menos irónicas, ni sarcásticas. Raro en mí. Es puro desconocimiento e interés cultural. Y vi mucho fuego en la tele. Y más en Twitter. Y memes. Y vídeos. Así que hice lo único que hago en estos casos: me hablo a mí mismo, me voy opinando a mí mismo -aunque mi mujer se crea que le hablo a ella, en realidad lo hago para escucharme-, y lo escribo para publicarlo en un post, vanagloriarme con "Me gusta's" y retuits, y alzar mi egolatría a un nivel excepcional, gracias a los cuatro "mataos" a los que engañaron con un fascismo izquierdoso.

Podéis poner comentarios con vuestra opinión. Pero lo mismo no me van a importar mucho, como todo lo relacionado con el tema.

Bona tarda.